La androfobia es el término con el cuál se define, al miedo hacia los individuos del género masculino. Generando múltiples malestares a quienes la sufren, al verse envueltos en situaciones donde se involucre un individuo de ese género.

Se le considera una clase de desorden de ansiedad en donde quien padece de ello, suele experimentar sensaciones de angustia o llegar al punto de sufrir un ataque de pánico al verse expuestos a los hombres.

Características de la Androfobia

La androfobia, aunque su nombre no sea reconocido, es una de las fobias más comunes que existen, en donde el pánico y la ansiedad carcomen al individuo que la padezca al estar cerca o al tener alguna clase de contacto con un hombre.

Esta fobia es capaz de afectar a personas de cualquier género, más, sin embargo, leyendo estadísticas, se indica que las mujeres jóvenes son las más propensas a padecer o sufrir esta clase de fobia.

Síntomas

Pacientes con androfobia que se encuentran expuestos o envueltos en situaciones que involucren hombres, pueden llegar a experimentar cierta clase de síntomas representativos de la fobia que padezca. Entre ellos se encuentran:

  • Sentimiento de ansiedad prominente.
  • Sudoración excesiva.
  • Ataques de pánico.
  • Problemas para ejecutar movimientos o realizar acciones.
  • Temblores.
  • Aumento de la frecuencia cardíaca.
  • Dificultad para respirar.
  • Ansias o deseos de escape.

A su vez, aquellos quienes padecen esta fobia, evitan ambientes en los que pueda verse envuelto o comprometido a mantener contacto con hombres.

Un claro ejemplo de ello es la evasión hacia los hombres y el tratarlos, en el caso de ser estos unos extraños. Pudiendo esta clase de actos ser capaz de interferir tanto con su vida social como con su trabajo.

¿Qué la ocasiona?

En base a distintos estudios en el área de psicoanálisis, se ha determinado que la tasa de población femenina alrededor del mundo que han sufrido alguna clase de abuso sexual o de agresión masculina es bastante alta.

Sumando a las figuras paternas de mal carácter, incomprensivas y agresivas, pueden ser causantes de la generación de esta fobia en un individuo de ambos sexos, puesto a que también se halla una gran cantidad de hombres jóvenes que adoptaron este miedo en base a experiencias traumáticas.

¿Cómo se identifica?

Al igual que con otras fobias, se es posible hacer un diagnóstico psicoanalista en donde se estudien los pensamientos, acciones y reacciones del paciente al verse involucrados en situaciones que incluyan sus temores.

Usualmente, cuando el paciente cumple los síntomas especificados o en algún momento fue víctima de alguna clase de abuso por parte de un hombre y decide acudir por ayuda, se es posible determinar su diagnóstico.

¿De qué manera afecta en la vida sexual?

Respecto al ámbito sexual, esta fobia puede atentar contra la vida personal y social de la persona. Quienes padecen de esto, tienden a mantener distancia de manera intencional hacia la compañía de una figura masculina, impactando así negativamente a su vida sexual.

Quienes son androfóbicos, generalmente tienden a sufrir depresiones por el hecho de guardarse todo para sí mismos. Independientemente de su atracción hacia los hombres o su deseo sexual hacia ellos, difícilmente el individuo podrá transmitir sus sentimientos a causa de su fobia.

¿Cómo es tratada?

Usualmente, quienes padecen fobias son expuestas a terapias de exposición, donde les hacen enfrentarse a sus temores. En el caso de la androfobia, la psicoterapia es su tratamiento principal, también llamada terapia conversacional.

Esta fobia es capaz de acarrear consigo síntomas en los que se enlaza el vértigo, siendo éste un trastorno médico. Por ello, se es necesario acudir a un profesional en el área psicológica ante la experimentación de los síntomas que componen esta fobia.

  • Terapia de exposición: En la terapia de exposición, el individuo atraviesa por distintas etapas a escalas graduales en la que se les será involucradas, cosas asociadas a los hombres.

Esta clase de terapia ayuda al individuo a controlar y mantener un mejor manejo en cuanto a sus sentimientos, pensamientos, sensaciones, acciones y reacciones hacia los hombres.

Un ejemplo de esto son las posibilidades de que el terapeuta a cargo, decida iniciar mostrando fotos de hombres, posterior mente a escuchar grabaciones de voz de hombres, en un siguiente plano ver vídeos de estos, hasta el punto en donde deba acercarse con lentitud a un hombre en la vida real.

  • Terapia cognitivo-conductual: En esta clase de terapia, la de exposición es sumada con otras técnicas terapéuticas, en donde el objetivo es enseñarle al individuo a cómo lidiar con su miedo a los hombres. En estas terapias el terapeuta se dedica a enseñar cosas como:
  • Ver el miedo de maneras distintas.
  • Enfrentarse a las sensaciones de aspecto corporal que se asocian a su temor.
  • Lidiar los aspectos emocionales y el impacto de pánico o miedo que ha tenido espacio en su vida.

Esta es una de las fobias más difíciles de sobrellevar para un paciente, porque de alguna forma u otra, relacionarse con hombres, aunque sea en un grado mínimo, es casi inevitable, en un mundo en el que alrededor de la mitad de la población es masculina.

Por esto, lo mejor que puedes hacer si piensas o crees tener esta fobia, es contactar con un psicoterapeuta, o un profesional de la salud mental que pueda hacer seguimiento de tu caso lo más pronto posible.

Referencias